Autores: Velázquez, Alejandro / Torres, Alejandro / Bocco, Gerardo
Año de publicación: 2004
País:
Idiomas: Español
Editorial: SEMARNAT, INE
Las enseñanzas de San Juan: Investigación participativa para el manejo integral de recursos naturales.
La acelerada pérdida del capital cultural y natural es uno de los resultados más contundentes de la acción humana durante el último siglo. Como consecuencia prevalecen actualmente procesos de envergadura inigualable tales como la desertificación, la deforestación, la fragmentación y su eventual incidencia en el cambio climático global.
Los grandes cambios de uso del suelo han impactado entre tres ycuatro veces más las regiones tropicales que otras zonas del planeta, y el resultado inmediato ha sido la desaparición de una proporción considerable del capital natural y la masiva pérdida de innumerables bienes y servicios derivados de los ecosistemas.
De cara al siglo XXI, muchos autores resaltan la necesidad de abordar nuevos paradigmas de investigación que ayuden a identificar nuevas aproximaciones científicas integradas, enfocadas a responder preguntas relevantes derivadas de demandas locales y realizadas con métodos y técnicas que garanticen la generación de datos adecuados para dar respuestas sensatas y aplicadas.
Este libro ilustra un ejemplo operativo de lo anterior y busca compartir las experiencias de un grupo de investigación interdisciplinaria en el manejo de los recursos naturales y su trabajo en estrecha vinculación con una comunidad indígena de la Meseta Tarasca en Michoacán. El principio básico de la colaboración se basó en una serie de interrogantes manifestadas por la comunidad respecto al manejo de sus recursos naturales y en torno a la posibilidad de contribuir, desde el ámbito académico, alfortalecimiento del programa de manejo de recursos de esta población bajo el principio de la sustentabilidad.
En este sentido, la primera parte de esta obra nos ubica dentro de lacomunidad, tanto geográfica como históricamente (capítulos 1, 2 y 3) y establece el marco conceptual sobre la investigación participativa y el uso sustentable de los recursos naturales. La segunda parte, describe las características físicas de la región de acuerdo con su perspectiva histórica y geológica (paleo-ecología), el relieve, el suelo y el agua (capítulos 4, 5 y 6). Con base en el relieve y el suelo se establecieron unidades de terreno, cuyos componentes se definieron utilizando técnicas de interpretación del terreno mediante percepción remota (especialmente interpretación de fotografías aéreas e imágenes de satélite), cartografía digital y muestreo estratificado. El que dichas unidades fueran consideradas entidades naturales integrales cartografiables permitió, en lo sucesivo, vincular sistemáticamente datos que describen la variabilidad de la cobertura vegetal con datos puntuales como la abundancia y diversidad de especies animales y vegetales. A través del uso de las unidades de terreno como un modelo descriptivo y operativo, se definieron unidades espaciales discretas donde se inventariaron los recursos naturales bióticos como la vegetación y la fauna (capítulos 7-12). Para efectuar el manejo de los recursos naturales, fue necesario tener en contexto al factor humano.
La tercera parte incluye parte de la historia de la comunidad, su estructura, su organización y las formas actuales y tradicionales del uso y conservación de sus recursos (capítulos 13-18). Teniendo en cuenta las características físicas, biológicas y sociales, se contemplaron distintas modalidades de aprovechamiento de los recursos, todas ellas basada en la aptitud del terreno y en el principio de la diversificación productiva.
La cuarta sección incluye la definición de la aptitud del terreno en unidades de manejo básicas, las cuales fueron consideradas uno de los ejes fundamentales del plan integral de manejo y fueron la referencia para la toma de decisiones comunitarias (capítulos 19 y 20). Actualmente, el manejo de los recursos naturales de la comunidad incorpora tecnología que le permite optimizar y planear sus actividades, pero para llegar a esta situación fue importante el esfuerzo y la visión de un grupo de encargados de la comunidad de la necesidad de capacitarse, así como de valorar el potencial y las limitaciones que en el largo plazo implica el uso de la tecnología (capítulo 19).
Entre las modalidades de aprovechamiento se consideró la explotación de recursos maderables y no maderables, la captura de carbono y otras alternativas de uso de la flora y fauna así como el ecoturismo (capítulos 21-23). A partir de los inventarios y los estudios de paisaje, se elaboró de un programa de desarrollo turístico que forma parte de un programa más general de manejo de recursos, el cual permite realizar esta actividad con el menor impacto para la biodiversidad del área. Estrechamente ligado a los trabajos de diversidad biológica se conformó un grupo de comunicadores y educadores ambientales que pretendió, por un lado, difundir los resultados del trabajo de investigación a un sector mayor de la comunidad y, por el otro, realizar trabajos específicos con algunos sectores de la propia comunidad que pudieran reproducir los esfuerzos de capacitación a futuras generaciones (capítulos 24-26).
Los resultados alcanzados muestran las bondades del trabajo participativo en donde se mezclan intereses provenientes del sector académico en la generación de conocimiento científico, unido con el conocimiento tradicional para la generación de proyectos productivos alternativos que concilien el uso de los recursos y su conservación y que puedan implementarse en comunidades rurales de otros países con características similares a las de México.
Si bien el gremio académico aún no incorpora claramente la relevancia de este tipo de investigación en su quehacer social, el conseguir resultados concretos y verificar enfoques frente a la realidad y no solamente contra el juicio dentro de un gremio, parece ser una perspectiva atractiva para grupos de universitarios interesados en frenar el deterioro de los recursos naturales.
La Comunidad de Nuevo San Juan, con el apoyo académico descrito en este libro, pero fundamentalmente gracias a su robusta organización social y productiva, consiguió formular el plan de manejo forestal de manera automatizado para el ministerio del ambiente. Esto, a partir de su sola capacidad técnica, de su fortaleza en su capacidad instalada en cuanto a los sistemas de información geográfica (SIG) y de cartografía digital, así como del uso de análisis estadísticos para sus estudios dasonómicos. Por todo esto, el plan de manejo presentado por la Comunidad, además de haber servido para cumplir con un requisito administrativo, les valió para hacerse acreedores a la Certificación Verde, distinción otorgada en 1997 por el Consejo Forestal Mundial (Forest Stewardship Council). Cabe mencionar que en México, sólo una decena de empresas sociales forestales comunitarias han recibido esta distinción, la cual supone un manejo ecológicamente eficiente del bosque, económicamente rentable y socialmente justo, esto en el marco del respeto a las tradiciones y relaciones locales.
La búsqueda de nuevos paradigmas de investigación que aporten elconocimiento necesario para ayudar a comprender mejor la dinámica de los paisajes y, por ende, su conservación merece ser re-evaluada con base en la visión que prevaleció hace algunas décadas. Una aproximación holística que permita entender una problemática compleja a partir del estudio de los territorios merece ser revisada, mejorada y adaptada para confrontar la crisis ambiental actual. La generación de datos derivados de procesos de esta investigación fueron la base para incrementar la credibilidad por parte de los pobladores locales y en consecuencia las posibilidades de éxito para establecer un manejo integrado de los recursos derivados del bosque.
Varios autores han descrito experiencias de muchas comunidades indígenas exitosas. Este libro, además de detallar los logros de la propia comunidad, describe de manera puntual el procedimiento de investigación, la vinculación y la ejecución de los proyectos resultantes y su implementación en acciones productivas incorporándolas a los mercados existentes. La propuesta original incluyó la apropiación de los proyectos por parte de la comunidad para ser incorporados a su sistema productivo con un enfoque integral y sustentable. Hoy la propia comunidad maneja y ejecuta la mayor parte de los productos derivados del proyecto.
Por último, deseamos mencionar que este libro destaca la importancia de la vinculación del sector académico para la resolución de problemas relacionados con el sector rural que tengan como fin último el generar un modelo de apropiación del territorio rural económicamente viable, socialmente justo y ambientalmente sustentable; en donde el actor local resulta ser el desencadenador de su propio modelo de desarrollo.
Autores: Velázquez, Alejandro / Torres, Alejandro / Bocco, Gerardo / (compiladores)