9 mayo, 2023, Por: CCMSS
Después de 31 años de vigencia de una ley secundaria, la Ley Minera, que dio pauta a enormes abusos y violaciones de derechos y que propició el incumplimiento de la Constitución y los tratados internacionales de los que México forma parte, ayer 8 de mayo por fin se consolidó un paso importante en la construcción de un marco legal más garante de derechos y más acorde con el compromiso de proteger el medio ambiente.
Con la publicación en el Diario oficial de la federación del Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley Minera, de la Ley de Aguas Nacionales, de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente y de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en materia de concesiones para minería y agua se reconoce, por fin, que la Ley Minera expedida en 1992 tuvo por objetivo privilegiar los intereses privados a costa del sacrificio y despojo de las comunidades y los territorios que habitan.
Las Colectivas Cambiémosla ya y Alianza por la Libre Determinación y Autonomía (ALDEA) hicieron un llamado a la Secretaría de Economía para que no deje pasar más tiempo para elaborar la reglamentación de este nuevo marco legal y que lo haga con las comunidades y organizaciones con el fin de fortalecerlo. Ambas colectivas, en las que participan comunidades y organizaciones de 19 estados del país, pidieron a Economía no permitir que el lobby corporativo diluya los contenidos de la ley en la reglamentación.
– Se retira el carácter preferente a la actividad minera. Ya no estará por encima de las actividades que las comunidades llevan a cabo en sus tierras.
– Establece la consulta previa, libre e informada para obtener el consentimiento antes de dar una concesión sobre los territorios.
– Prohíbe la minería en áreas naturales protegidas, zonas sin agua o zonas donde se ponga en riesgo a la población, así como la minería submarina.
– Obliga a tener un programa de manejo de residuos y un programa de restauración, cierre y post-cierre con obligaciones hídricas y ambientales.
– Limita el traspaso de concesiones. Se autoriza sólo si se pagan los derechos correspondientes y se cumplen con los requisitos de la concesión original.
– Elimina la expropiación como derecho del concesionario.
– Separa y diferencia los procesos de exploración y explotación.
–No permite tener concesiones ociosas. Se deben comenzar obras en los noventa días hábiles siguientes a partir de que registran la concesión, esto obstaculiza la especulación financiera.
–No permite construir sitios de disposición final de residuos en áreas naturales protegidas, humedales, vasos, cauces o zonas federales donde se afecte a la población.
-Se elimina la figura de terreno libre y primer solicitante. Las concesiones sólo se otorgarán mediante concurso o licitación pública.
– Las concesiones se cancelarán si las empresas:
Si bien estos puntos no son todos los necesarios para poner un alto a los abusos de la minería en México, son sin duda avances en la dirección correcta… Y desde ambas colectivas continuaremos trabajando para impulsar los cambios pendientes.
Finalmente, las colectivas hacemos un llamado a todos los grupos parlamentarios a revisar los contenidos de fondo de esta ley y a ponderar los derechos que reconoce tanto para los pueblos y comunidades como para los bienes naturales del país.
La Colectiva Cambiémosla Ya reúne a pueblos, comunidades, organizaciones civiles, movimientos, personas académicas, defensoras de la tierra y el territorio organizados para impulsar cambios profundos en la Ley Minera. Entre sus miembros hay comunidades y pueblos afectados por proyectos mineros en los estados de Sonora, Morelos, Zacatecas, Puebla, Baja California Sur, Veracruz; Oaxaca; organizaciones como CartoCrítica; Centro Mexicano de Derecho Ambiental; Comités de Cuenca del Río Sonora; Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible; Consejo Maseual Altepetajpianij; EDUCA, El poder del consumidor; Engenera; Fundación Heinrich Böll; Fundar, Centro de Análisis e Investigación; Iniciativa Sinaloa; Movimiento Atzin No a la Minería, Movimiento Morelense contra la Minería Tóxica; Organización Familias Pasta de Conchos; Oxfam México; PODER; Unión de Comunidades de la Sierra de Juárez; Clínica Jurídica para la Justicia Ambiental Berta Cáceres y académicos y académicas de UIA, UAM y UNAM.
La Alianza por la Libre Determinación y Autonomía (ALDEA) es una articulación de pueblos, comunidades y organizaciones civiles con presencia en 18 estados de la República. Quienes la integramos, nos unimos por una necesidad compartida de transformar las estructuras de desigualdad e injusticia que durante años han mantenido en la marginación y la pobreza a los pueblos indígenas en nuestro país.